Datos sobre sistemas de aspiración profesionales
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La tecnología de aspiración médica desempeña un papel crucial en los entornos sanitarios modernos, ya que permite realizar diversos procedimientos e intervenciones médicas. Los profesionales sanitarios, como médicos y personal de enfermería, utilizan con frecuencia esta tecnología sin tener que profundizar necesariamente en los principios físicos subyacentes. Este artículo tiene como objetivo proporcionar una explicación simplificada de la ciencia física que hay detrás de la tecnología de aspiración médica, centrándose en conceptos clave como presión, presión negativa, vacío, aspiración y flujo, para ampliar los conocimientos de los profesionales sanitarios.
La presión es la fuerza aplicada por unidad de superficie y es fundamental para comprender la tecnología de aspiración médica. En el contexto de los dispositivos médicos, la presión se suele medir en unidades como pascales (Pa) o milímetros de mercurio (mmHg). Al hablar de la presión en un entorno médico, es fundamental diferenciar entre la presión absoluta y la presión manométrica.
En física, la presión es el resultado de una fuerza aplicada verticalmente sobre una superficie.
Si los líquidos o gases en reposo se encuentran en un recipiente cerrado, la presión actúa por igual en todas las direcciones. Actúa de manera uniforme y siempre de forma perpendicular a las superficies del recipiente.
La gravedad, que actúa sobre el aire, también ejerce una presión constante sobre la tierra, es decir, la presión atmosférica. Esto depende, entre otras cosas, de las condiciones meteorológicas.
La presión negativa se refiere a una presión inferior a la presión atmosférica. Un vacío es un espacio sin materia, lo que da como resultado una presión inferior a la presión de la atmósfera circundante. En aplicaciones médicas, la presión negativa se utiliza para facilitar diversos procedimientos e intervenciones.
En un espacio donde la presión es inferior a la presión ambiental, hay presión negativa. En la práctica, una presión negativa también se suele denominar vacío.
¿Qué sucede con la presión negativa? Los sistemas de aspiración médica utilizan presión negativa para transportar aire, fluidos o ambos.
Un aspirador eléctrico o mecánico crea presión negativa. Esto provoca una fuerza que mueve el aire y/o el fluido.
La aspiración es la fuerza que atrae fluidos o materiales. En contextos médicos, la aspiración se utiliza habitualmente para extraer fluidos corporales, secreciones y aire durante procedimientos quirúrgicos o en la atención al paciente. Comprender qué es la aspiración implica comprender los principios de la presión negativa y la aplicación controlada de las fuerzas de vacío.
El flujo en los sistemas de aspiración médica hace referencia al movimiento de aire o fluidos dentro del sistema.
La aspiración es la aplicación de presión negativa para el movimiento de aire, líquidos o sólidos. Mientras que la presión negativa es estática, la aspiración se refiere al efecto dinámico que pone en movimiento los fluidos.
El flujo o caudal es una cantidad medible. Se refiere a la cantidad de materia que se mueve en un tiempo determinado.
El flujo se expresa como el volumen de aire o fluido desplazado por minuto. La unidad utilizada es litros por minuto.
Los profesionales sanitarios deben tener en cuenta los caudales al utilizar la tecnología de aspiración médica con el fin de garantizar un rendimiento óptimo durante los procedimientos. El flujo se ve influido por factores como el diámetro de los tubos, la potencia de la fuente de vacío y la presencia de cualquier restricción en el sistema.
Durante la extracción, el caudal máximo del dispositivo es un criterio importante. Indica la rapidez con la que se puede generar presión negativa al inicio de la terapia y el volumen máximo que se puede drenar en un periodo de tiempo determinado.
Un aspirador puede generar un vacío máximo y transportar un volumen máximo.
Si el fluido se drena demasiado rápido, la presión negativa disminuye y no se puede mantener.
Se distingue entre dispositivos con vacío alto, medio y bajo. Cuanto mayor sea el nivel de vacío establecido, mayor será la fuerza que actúa sobre el material que se va a drenar y mayor será el nivel de aspiración.
La tecnología de vacío alto es fundamental en varios procedimientos quirúrgicos realizados en el hospital o en las consultas de residentes. También se utilizan para la aspiración de las vías respiratorias.
Más información sobre los sistemas de aspiración quirúrgica de Medela
Por otro lado, los dispositivos de vacío bajo se utilizan principalmente para el tratamiento de heridas con presión negativa y terapias de drenaje torácico.
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